A los pocos minutos de jurar como ministra de Culturas, Sabina Orellana, anunció hoy (20.11.2020), que, a través del Viceministerio de Descolonización y Despatriarcalización, se iniciará una investigación en contra de los miembros de la Unión Juvenil Cruceñista y la Resistencia K’ochala por supuestos actos de discriminación y racismo contra la mujer indígena y de pollera, en el periodo de gobierno de la pexresidenta Jeanine Áñez.
«Se va investigar todos los actos de violencia y racismo que hicieron contra las mujeres, en especial a las de pollera y a las mujeres indígenas, solamente ha sido el delito de ponernos una pollera, llevar dos trenzas, eso lo vamos a tomar desde nuestro Viceministerio (…) Hay personas, por ejemplo, la Unión Juvenil Cruceñista, la Resistencia K’ochala, entonces esos jóvenes tienen que pagar por los actos que han hecho», afirmó Orellana.
La funcionaria de gobierno aseguró que se actuará en el marco de la Ley 045 Contra el Racismo y toda forma de Discriminación para que los integrantes de esas organizaciones sean investigados.
¿Ajuste de cuentas?
Según la agencia gubernamental ABI, en el mes de enero de este año, miembros de la Resistencia K’ochala desalojaron violentamente a militantes del Movimiento al Socialsimo (MAS), que realizaban su concetración en la plaza Cala Cala, de la ciudad de Cochabamba.
Esa nisma fuente señala que, con el pretexto de fraude electoral en las elecciones del 20 de octubre de 2019, a finales de ese mes, integrantes de la Unión Juvenil Cruceñista agredieron a sectores indígenas de Santa Cruz y de Cochabamba, hasta donde se trasladaron.
Según relató una de las víctimas, una mujer indígena, dijo que fue agredida cuando retornaba de una actividad familiar, y le exigieron grabar un video diciendo que era una infiltrada del Gobierno de Evo Morales, cotó la agencia gubernamental.
