Monseñor Aurelio Pesoa

Representantes da Conferencia Episcopal de Bolivia (CEB) marcan distancia con el nuevo cardenal boliviano, Toribio Ticona, al haber aclarado hoy (13.06.2018) que él no es el vocero oficial de la Iglesia Católica y la voz autorizada la tienen los miembros del directorio elegidos legítimamente.

“La Conferencia Episcopal Boliviana y sus autoridades, legítimamente elegidas, o sea, Presidente, Vicepresidente, Secretario General y Consejo Episcopal Permanente, es la voz oficial de la Iglesia Católica en Bolivia. El Cardenal es miembro de la Conferencia Episcopal Boliviana, como Obispo Emérito, teniendo derecho a voz, de acuerdo con sus Estatutos”, señaló monseñor Aurelio Pesoa al dar lectura al comunicado de la CEB.
En el comunicado se rechaza las malas interpretaciones que se puedan hacer de los dichos del nuevo cardenal Ticona.

“Ante malas interpretaciones de algunas declaraciones del Cardenal que han podido crear confusión en la opinión pública, la CEB se reafirma en la línea de reflexión que ha expresado en distintas oportunidades mediante comunicados, mensajes y cartas pastorales públicas”, señal el mensaje.

La Conferencia episcopal cuestiona los esfuerzos de los políticos por dividir o manipulara a la Iglesia.

“Rechazamos cualquier intento de división o manipulación de la Iglesia Católica. Queremos seguir iluminando a nuestro Pueblo boliviano con la libertad de los Hijos de Dios y por la responsabilidad de nuestro ministerio pastoral”, dijo.

“La Iglesia tiene un sola voz y es la CEB. Agradecemos al Papa por la designación del cardenal Toribio Ticona, pero queremos decir que él es parte de los obispos y está de acuerdo con todos nuestros documentos y posiciones expresadas en los últimos tiempos”, enfatizó a radio local el padre José Fuentes, secretario adjunto de la CEB.

En pero, el Cardenal, Toribio Ticona, manifestó a un diario local que los obispos se han resentido porque había pedido un poco de tiempo a los periodistas para pronunciarse sobre el resultado de referendo vinculante del 21 de febrero del 2016, cuando la Iglesia fue clara al pedir a Evo Morales, respeto a la voluntad popular que rechazó la repostulación del Mandatario.

«Por una palabra que dije, que el 21 de febrero, que sobre esa pregunta no puedo decir nada porque tengo que hablar con mis hermanos los obispos, ellos se han resentido por eso, creyendo que no estaba de acuerdo», manifestó Ticona a El Deber.