La Policía y la Fiscalía de la ciudad de El Alto han detenido a una banda de proxenetas dirigida por dos menores de 16 años de edad que explotaba sexualmente a estudiantes y menores de edad en esa urbe.

Todo empezó con el seguimiento efectuado por equipos de inteligencia a dos menores de edad que ofertaban y reclutaban a estudiantes con el fin de prostituirlas.

Con la captura de estos menores de 16 años de nacionalidad peruana, continuó los operativos en varios alojamientos y hostales ubicados en la Ceja de El Alto, en los que se procedió a la detención de más de una decena de personas.

La Fiscalía Departamental de La Paz informó este martes que las aprehensiones se realizaron tras unos operativos encabezados por la Policía y el Ministerio Público en distintos alojamientos en Villa Dolores y 12 de octubre, una de las zonas rosas más peligrosas de la ciudad de El Alto, colindante con La Paz.

Tras los operativos se detuvieron a más de una docena de personas, entre ellas dos menores de 16 años quienes «mediante engaños y cierta relación de amistad con la víctimas» capturaban y explotaban a las jóvenes, según un boletín de la Fiscalía.

Los capturados son investigados por la presunta comisión de delitos de trata de seres humanos, corrupción de niño o adolescente, proxenetismo y asociación delictuosa.

Además, el Ministerio Público investiga a otra menor de 16 años conocida con el alias de «la peruana», quien se presume que trasladó a cuatro menores de edad a Perú con fines de explotación sexual, de acuerdo al comunicado.

Algunas de las jóvenes captadas por esa red fueron reportadas como personas desaparecidas.

El lunes, el director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) en El Alto, Douglas Uzquiano, indicó a los medios que las menores eran captadas a través de las redes sociales y con contactos en colegios.Las autoridades sospechan que la principal cabecilla es la joven de 16 años conocida como «la perucha», según Uzquiano.

Esta red de trata y tráfico tenía de «brazos operativos» a dos mujeres de 18 años, quienes administraban la organización criminal.

En los operativos, los peritos de la Fiscalía identificaron a dos adolescentes de 16 y 17 años que fueron reportadas como desaparecidas, quienes tras ser entrevistadas dieron detalles de esta red de explotación sexual.