Este martes se “descubrió” que el presidente Evo Morales Ayma no acude al dialogo con la Universidad Pública de la ciudad de El Alto (UPEA), porque teme que sea asesinado.
Esta versión corresponde, nada más y nada menos que al Vicepresidente del instrumento político MAS-IPSP, Gerardo García, que justificó con ese argumento, la decisión de la cúpula de este partido y del gobierno de turno para negar a la UPEA la audiencia solicitada a @evoespueblo.
“Son permanentes las amenazas de la oposición que estamos recibiendo y han amenazado a nuestro Presidente. Si bajamos a un ministro u otro ministro, el próximo paso va a ser el Presidente. Entonces frente a esa amenaza, no puede ser que se pueda arriesgar la vida de nuestro Presidente y aceptar una reunión de ese nivel”, dijo Gerardo García.
¿Pero, cómo descubrió el MAS esta información?, supuestamente en las “amenazas de la oposición” que ellos reciben.
En contrapartida, las autoridades del gobierno no han confirmado ni desmentido esta versión del dirigente del partido político de Evo.
“Esta no es la primera vez, han amenazado de muerte a (Evo) panfleteando. Entonces por esa situación que se vive en El Alto, no podemos arriesgar a nuestro Presidente”, insistió García en su versión.
Entre las condiciones de la UPEA para iniciar el dialogo con el gobierno está el hecho de que Evo Morales participe del encuentro de principio a fin. El gobierno niega esta solicitud y dispone varios ministros rechazados por los representados de la Universidad alteña.
Este discurso de que “quieren matar al Presidente” ha sido utilizado en varias ocasiones por los funcionarios de gobierno y militantes del MAS desde enero de 2006.
En mayo del 2016, el vicepresidente Álvaro García Linera, dijo “que quieren matar al Presidente, y han intentado matar como así intentaron matar a Zárate Villca por busca la igualda”, en discurso emitido en un acto del poblado de Caracollo, Oruro.
En diciembre del 2016 el ministro de Gobierno, Carlos Romero, dijo que una joven de 17 años, usando las redes sociales, había dicho pedido asilo en Estados Unidos a cambio de asesinar a Morales.
Lógicamente, el argumento del MAS de que, “quieren matar al Presidente”, no cayó nada bien a los representantes de la UPEA.
El representante de los docentes de la UPEA, Salvador Quispe, rechazó el argumento de Gerardo García. “Nosotros no estamos armados, no tenemos garrote, ni palos, sí quieren, que nos revisen”, dijo el dirigente.
En el pasado, la ciudad de El Alto, fue un “bastión electoral” del MAS. Todos los hechos de corrupción del gobierno de Evo Morales, del Alcalde alteño Edgar Patana (MAS), y el último asesinato a sangre fría del universitario Jonathan Quispe, agravó la distancia entre el gobierno y la población alteña.
