A pocos días de ser inaugurado los juegos Odesur en Cochabamba, a las denuncias de supuesta corrupción en las millonarias adjudicación directas de contratos a exministros de Evo Morales y empresas cuestionadas, hoy se suma la decisión de atletas de renunciar a participara en estos juegos.
Según el diario cochabambino Los Tiempos, el atleta tarijeño judoca, Martín Michel, El judoca tarijeño decidió apartarse de los XI Juegos Suramericanos Cochabamba 2018 como una medida de protesta por la falta de apoyo y respaldo a los atletas por parte del gobierno central, gobernación y Alcaldía.
“Nosotros vamos a competir y en estas condiciones no se puede, es mejor no participar y que sepan nuestra molestia», dijo de forma contundente Michel.
Ante las consecuencias de su decisión, el destacado judoca aclaró, «yo, como presidente de la Comisión de Atletas Olímpicos, puedo hacerlo sin sufrir las sanciones del código de buena conducta, como el resto de los chicos”.
Martín Michel protesta y renuncia a los juegos Suramericanos porque hasta la fecha, el Ministerio de Deportes no realizó la entrega de viáticos, de pasajes e incluso las delegaciones no pueden concentrarse en un solo lugar debido a la falta de recursos económicos.
El judoca boliviano Martín Michel recibió ayer una llamada de amenaza e insultos tras hacer conocer que no participará en los Juegos Suramericanos 2018 como medida de protesta a la falta de apoyo a los deportistas por parte del Gobierno.
«El día de ayer recibí una llamada, me insultaron, me dijeron que deje de hablar huevadas. No sé si destape una olla de grillos o qué. No considero que haya dicho algo que no sea cierto», manifestó el multicampeón nacional a Los Tiempos en contacto telefónico.
Juegos Odesur desnuda la pobreza
Los atletas bolivianos históricamente en Bolivia son fruto de su propio esfuerzo y pasión por el deporte que abrazan.
Ese también es el caso del profesor Ronal Quispe, gran marchista nacional que competirá en los Juegos Suramericanos de Cochabamba 2018.
Él relató al periodista Juan Carlos Toro, del diario Página Siete, que el 90% de su salario lo invierte en su preparación porque no recibe apoyo de las autoridades.
Quispe trabaja como profesor de educación física, en una unidad educativa de La Paz. La alimentación, transporte, indumentaria y otros gastos corren por cuenta exclusiva del atleta para participar en los Juegos.
“El tema económico fue un problema, siempre trabajamos sin apoyo. Asumimos desde el principio que no iba haber respaldo pero igual seguimos adelante”, manifestó el deportista paceño.
Lamentablemente, el gobierno de Evo Morales, poco o nada ha hechos por estos atletas de élite.
La orfandad de estos deportistas es evidente, no solo porque ellos lo han denunciado en los medios de comunicación, sino, porque muchos campeones y campeonas al no recibir apoyo del Estado, terminaron aceptando ofertas de cambiar nacionalidad deportiva para representar a Colombia y Argentina. Es el caso de la raquetbolista María José Vargas que el año 2013 se integró a la selección argentina.
En otro caso muy similar, en octubre de 2014 Mario Mercado Valenzuela se coronó campeón mundial juvenil de ráquetbol en Cali, Colombia. Paradójicamente fue la última vez que representó a Bolivia en un torneo internacional, porque después de esa conquista aceptó la invitación de la Federación Colombiana para naturalizarse y jugar por ese país.
Fue, sin embargo, una decisión dolorosa, difícil, pero al mismo tiempo bien analizada porque ni siquiera por la magnitud del logro la dirigencia de la disciplina y menos la del Gobierno le propusieron brindarle apoyo para continuar representando a Bolivia.
