El alcalde de La ciudad de La Paz, Luis Revilla, anunció hoy (15.12.2020), el «encapsulamiento» del barrio de Miraflores por el rebrote cel coronavirus. La autoridad edil anunció la aprobación de nuevas medidas de restricción para controlar nuevamente la propagación del Covid-19.
«Ya se ha producido un rebrote puntual en una zona específica de La Paz, en el centro de La Paz, que es buena parte de Miraflores y que en el curso de esta la semana tenemos que encapsular, de tal manera que ese rebrote se convierta en un brote comunitario», aseveró Revilla ante los periodistas.
Ante este nuevo riesgo del Covid-19 en la Sede de Gobierno, la autoridad municipal anunció que el conjunto del Centro de Operaciones de Emergencias Departamentales (COED), evalúa una lista de actividades económicas que serán prohibidas temporalmente en todo el departamento de La Paz.
«En primer lugar se ha determinado acordar en el conjunto de los municipios y también con la gobernación, cuáles van a ser las actividades que definitivamente van a estar prohibidas, de aquí en adelante, y particularmente son actividades, no solo nocturnas sino actividades diurnas que impliquen consumo de bebidas alcohólicas y aglomeración de personas», dijo.
«El COED departamental va aprobar una Resolución, en el curso del día de hoy, que va establecer el listado de estas actividades económicas que van a estar terminantemente prohibidas en los municipios y en el departamento justamente porque hemos recibir este informe epidemiológico que da cuenta que estamos ante un riesgo», aseguró Revilla.
Frente a esta realidad, la autoridad municipal descartó cualquier posibilidad de «flexibilizar aún más las actividades, de los que están hasta este momento», porque el rebrote, como el registrado por la Dirección de Epidemiología en la zona de Miraflores demandará el retorno a las medidas de bioseguridad restrictivas para sus habitantes.
Hasta la noche de ayer las ciudades de Santa Cruz y La Paz, han oficializado el rebrote del Covid-19, por el descuido de su población, que en los últimos meses han dejado de usar los barbijos, no han respetado el distanciamiento social y prácticamente han dejado a un lado el lavado de manos y la desinfección antes de ingresar a sus viviendas.
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