El presidente Evo Morales cree que las elecciones primarias son similares a las elecciones generales, donde participan candidatos de todas las líneas políticas.

Hoy en un acto desarrollado en el municipio de Corque, Oruro, dijo que su partido el Movimiento Al Socialismo (MAS) dará «waska» a la “derecha” en las elecciones primarias programadas para enero de 2019.

En «las elecciones primarias vamos a dar waska, van a ser derrotados de lejos, porque está la conciencia del pueblo boliviano», dijo Morales, como sí en las elecciones internas de los partidos participaran, izquierdistas, derechistas y demás candidaturas.

Las elecciones primarias son contiendas electorales internas de cada uno de los partidos políticos, para elegir entre dos o más opciones, al binomio que representará al partido político en una Elección General.  Las elecciones primarias no son para legitimar candidatos inhabilitados.

Evo Morales, acostumbrado a dividir en su discurso a los bolivianos en dos bandos, derecha e izquierda, cree que son “pretextos” los motivos planteados por distintos sectores políticos y sociales para anular las elecciones primarias aprobada en forma apresurada en el Parlamento (Asamblea Legislativa), por los dos tercios de su partido el MAS.

Durante los 13 años continuos en el Gobierno, Evo Morales utilizó el discurso del miedo, de que los “vende patrias”, los “derechistas”, los “imperialistas” buscan restaurar el neoliberalismo en el país.

Sin embargo, al cabo de 13 años de Gobierno continuo, Evo Morales y el MAS enfrentan una profunda crisis de credibilidad entre la población boliviana, debido a los cientos de casos de corrupción ventilados en los medios de comunicación, más que en los estrados judiciales.

La caída de Evo Morales fue iniciada en el mes de febrero del 2016, cuando el conductor de televisión, Carlos Valverde, develara el secreto bien guardado dentro del pasado de Presidente “indígena”.

Evo Morales había mantenido una relación sentimental con Gabriela Zapata, cuando bordeaba los 20 años de edad y él los 47. De esta relación, supuestamente nació un hijo. La relación y el hijo fue admitida en conferencia de prensa, trasmitida por el canal de televisión estatal, por el mismo Evo Morales Ayma. Carlos Valverde exhibió un certificado de nacimiento con los datos personales del niño y los padres. 

La revelación de este secreto, más el supuesto caso de tráfico de influencias, ocasionaría que Evo Morales perdiera el referendo vinculante con el que pretendía cambiar el Artículo 168 de la Constitución Política de Estado (CPE), para tener la posibilidad de repostularse indefinidamente a la Presidencia de Bolivia.

En esa consulta popular vinculante del 21 de febrero del 2016 (21F), “Bolivia le dijo No” le quiere a Evo Morales.

Antes de desarrollarse el referendo vinculante el domingo 21 de febrero del 2016, Evo Morales, el vicepresidente Álvaro García Lineras habían prometido cumplir los resultados de esta consulta popular, cualquiera fuera el resultado, sin embargo meses después de la derrota emprendieron una campaña para no cumplir el resultado del 21F que, con un 51,3% de la votación, rechazó la repsotulación Presidencial de Evo Morales.

Hoy (25.11.2018), a más dos años y ocho meses del referendo vinculante del 21F, Evo Morales y su partido, continúan en su campaña por desconocer la Constitución Política del Estado y la voluntad del pueblo manifestada en las urnas el 21 de febrero del año 2016.

El mandatario no tiene reparos en esgrimir argumentos tales como que, los políticos de la oposición o las plataformas ciudadanas que surgieron para defender el voto del pueblo emitido el 21 de febrero del 2016, son financiados y tienen mucho dinero para difundir supuestas mentiras, cuando en realidad estos sectores denostados por Morales, lo único que han pedido es que el Mandatario respete el Artículo 168 de la CPE y el resultado del referendo vinculante del 21 de febrero del 2016.

«Ni se imaginan, de las llamadas plataformas, de ahí adentro nos informan que tienen mucha plata, van a tratar de comprar conciencia, mentir al pueblo para confundir», esgrimió Morales para intentar justificar su intención de respostularse a la Presidencia de Bolivia por tercera vez consecutiva, situación prohibida por el Artículo 168 de la CPE.