En Cochabamba un policía, identificado como Miguel Ángel Quilla Cachi, de 31 años de edad, se aprovechó de la inocencia de una niña de 13 de edad y de las precarias condición económica de madre, según la publicación del diario popular Gente.
Según la versión de las autoridades cochabambinas, la niña habría sido captada a sus 11 años de edad, habiendo sido inducida a la venta ilegal de pastillas abortivas en un principio.
Posteriormente este policía abusó sexualmente de la menor de edad y luego procedió a prostituirla, ofreciéndola a seis de sus camaradas para que abusen de ella.
Tras los múltiples abusos sexuales la menor de 13 años quedó embarazada y fue obligada a abortar con las mismas pastillas que vendía para este policía cuyo grado sería sargento, según el diario Opinión.
Por si fuera poco, este uniformado del Verde Olivo volvió a violarla otra vez y ahora la menor de 13 años está con dos meses de embarazo, según la publicación de medios de comunicación de Cochabamba.
Esta violación y prostitución de la niña fue denunciada el pasado domingo y el policía violador, Miguel Ángel Quilla Cachi, fue aprehendido el lunes por la tarde, informó la directora de la Oficina de Apoyo para la Familia, Andrea García.
“En primera instancia la niña ha sido captada por el policía cuando ella tenía 11 años para vender pastillas abortivas. En segundo ofrece a la niña a otros de sus camaradas”, señaló al diario Gente.
El calvario de la menor comenzó el año 2017, cuando el policía Miguel Ángel Quilla Cachi fue a almorzar a la pequeña pensión de la madre de la niña. En ese local el policía se ganó la confianza de la menor que en esa ocasión solo tenía 11 años.
Este policía de 31 año, además de aprovecharse de la inocencia de la niña, también se aprovechó se aprovechó de la difícil situación económica que atravesaba su madre y la ausencia de la figura paterna en su crianza.
En ese año, la menor empezó a vender las pastillas abortivas para este policía. Fuentes vinculadas a la investigación, indicaron que la esposa del uniformado es una farmacéutica y supuestamente era ella quien entregaba las tabletas para la comercialización.
Según la directora de la Oficina de Apoyo para la Familia, Andrea García, la primer violación a la niña sucedió el año 2018, siendo el autor del abuso sexual un funcionario del Estado llamado a dar seguridad y protección a la población: un policía de Sacaba.
En esa ocasión Miguel Ángel Quilla Cachi obligó a abortar a la niña y la denuncia presentada no prosperó, debido a que este policía interfirió en el informe y fue cambiado de destino, siendo abusada sexualmente en reiteradas ocasiones por otros policías.
La violación que dio lugar al segundo embarazo ocurrió hace dos meses.
El abogado de la familia de la víctima, Ritzon Flores, indicó que los parientes de la menor se preocuparon de su estado de salud y sospechaban que algo malo le estaba pasando.
“Recurriendo a mi persona es que se hace la coordinación con personal de Inteligencia de la Policía para proceder al arresto de este individuo, ya que cita a la menor el día de hoy (ayer) para poder encontrarse y le indica: ‘te voy dar plata, no me metas en problemas, yo voy a tener muchos más problemas que tú, ya sabes lo que va a pasar si no tomas las pastillas’”, relató el jurista.
Ayer, a mediodía, se logró la aprehensión del sindicado cerca del mercado 10 de Febrero de la zona de Villa Pagador. El hombre estaba a bordo de un RAV4 azul, en cuyo interior se encontró más de Bs 8.000 y varias pastillas abortivas.
Se conoce que ese era el dinero que le entregaría a la víctima.
Por su lado, el comandante departamental de la Policía de Cochabamba, Raúl Grandy, informó que el policía acusado de violación será dado de baja.
Se conoce que Miguel Ángel Quilla Cachi, incluso tendría antecedentes por casos de narcotráfico.
“De acuerdo con la acumulación de los antecedentes y de todos los elementos que se puedan investigar, este policía va a ser dado de baja de manera ignominiosa (…), vamos a pedir celeridad”, agregó.
El jefe policial advirtió que no se permitirá que un efectivo de la entidad del orden, independientemente de su rango y ocupación, empañe la imagen de la institución del verde olivo. Se espera que hoy se realice la audiencia de medidas cautelares del policía acusado de violación, no se descarta ampliar la investigación a otros agentes presuntamente involucrados.
La directora de la Oficina de Apoyo a la Familia, Andrea García, señaló que no se descarta que la menor de 13 años violada por el policía se someta a la interrupción legal del embarazo, amparada en la Sentencia Constitucional 0206/2014 que permite a las víctimas de violación practicarse abortos.
Añadió que en el primer aborto ilegal por la violación realizada por el policía de Sacaba a la que fue sometida la menor por las pastillas dadas por el oficial, ella quedó con secuelas físicas y psicológicas.
“Se realizó el aborto sin ningún tipo de cuidado para la menor, ha sufrido mucho por eso tiene temor”, señaló.
Acotó que funcionarios de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia (DNA) de la Alcaldía de Cochabamba realizan el acompañamiento de la víctima para precautelar sus derechos. (con información del diario Gente).