La ex presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, declaró ante el Tribunal Primero de Sentencia Anticorrupción de La Paz, sobre otros detalles acontecidos después de que Evo Morales renunció a la Presidencia el domingo 10 de noviembre de 2019 y el vacío de poder ocasionados por él y todos los sucesores de su partido, el Movimiento al Socialismo (MAS).
Desde las 17:00 del domingo 10 de noviembre de 2019 y las 20:00 del martes 12 de noviembre de 2019 Bolivia no tenía Presidente, Vicepresidente ni ministros; los presidentes de las Cámaras de Senadores y de Diputados junto a sus directivas todos habían renunciado instigados por Evo Morales y su séquito. Evo Morales y su Vicepresidente huyeron en la noche del lunes en avión militar del gobierno de México.
Bolivia estaba al borde de una guerra civil, en La Paz, El Alto, Potosí, Sucre, Cochabamba y Santa Cruz las movilizaciones habían ingresado en el terreno del vandalismo y la delincuencia, los seguidores del MAS quemaron varios puestos policiales el la ciudad de El Alto, saqueando alimentos, así como material antimotín y armas.
La ex Mandataria Jeanine Añez recordó que en ese momento tan crítico que vivió Bolivia es que le fue dado la responsabilidad de asumir la Presidencia del País en su condición de segunda Vicepresidenta de la Cámara de Senadores, tras la renuncia colectiva de todos los senadores y diputados habilitados en la línea de sucesión.
A continuación la declaración de la ex presidenta Jeanine Áñez ante el Tribunal Primero de Sentencia Anticorrupción:
Jeanine Áñez: Se ha dicho muchas mentiras en esa fundamentación pero lo cierto es que hacen 391 días que yo estoy privada de mi libertad, lo cierto es que soy acosada políticamente desde afuera por el Gobierno y acosada aquí dentro del recinto penitenciario.
Más bien que ahora no tengo a todas esa gente gritando, insultándome, denigrándome, ofendiéndome porque seguramente desde el Ministerio de Gobierno han instruido que hoy no vengan porque iban a estar presentes ustedes acá.
Pero lo cierto es que hacen 390 días estoy sometida a procesos totalmente injustos, acusándome de delitos que no he cometido, lo cierto es que hacen 390 días que nosotros, a través de mis abogados, hemos presentado una serie de recursos y nos lo han negado absolutamente todos, por eso este es un proceso eminentemente político donde yo estoy en absoluta indefensión, no tengo posibilidad alguna de defensa y lo he corroborado una vez más el día en que mis abogados presentaron incidentes y excepciones, donde ustedes señores magistrados no se atrevieron a referirse al fondo de los incidentes y excepciones, no aclararon, no enmendaron, no complementaron nada lo que pidieron mis abogados, eso me deja a mí en total indefensión.
Yo no sé qué posibilidades tenemos los presos políticos para llevar un juicio adelante, porque conmigo han sido implacables, porque es muy fácil estar condenando a una mujer, porque en este país hasta en la peor dictadura, ese que fue presidente dictador, tuvo un juicio de responsabilidades. Le respetaron sus derechos, derechos que a mí no me han respetado desde el inicio de este calvario, de estos 391 días para ser exactos.
Porque me tienen acá presa y acosada políticamente, insisto en que no tengo posibilidades de defensión porque cuando uno se rige a la ley por lo menos algunos recurso, que yo estoy segura que tengo derecho, pero todos los conductos de la legalidad se me cierran, aquí no hay posibilidades de defensa porque lo jurídico no tiene ningún valor, lo jurídico aquí no vale nada, esto es un juicio político y yo soy una presa política.
En el año 2019, todos conocemos la convulsión que vivía el país, todos fuimos testigos de lo que estaba sucediendo en este país y tiene su origen; nada de lo que sucedió en el 2019 hubiera sucedido sí es que Evo Morales (hubiese) respetado esa Constitución (Política del Estado), que muchas veces la tienen como referencia de manera discrecional.
Esa Constitución es clara cuando nos dice que el Presidente y el Vicepresidente tiene derecho a ser reelegido una sola vez, una sola vez, aquí no hay dónde perderse, ni ser eruditos en el derecho para saber que un Presidente y un Vicepresidente pueden ser reelegidos una sola vez, pero en el año 2019 Evo Morales quería una cuarta elección, es decir, que el propósito era elegirse eternamente, hacerse del Poder hasta que tenga vida y obviamente de que esa decisión arbitraria tuvo una respuesta porque surgió del hartazgo de la gente. Sobre todo cuando todos supimos que hubo un fraude descarado y la gente salió a las calles y yo en ese momento era una senadora, senadora electa que estaba en mi departamento haciendo también una manifestación pacífica, como una ciudadana cualquiera.
En ese momento vivimos situaciones muy duras y se hubieran evitado sí es que Evo Morales y el MAS no hubieran intentado hacer ese fraude electoral, ese fue el origen de toda esta convulsión.
Sí esta Constitución hubiera sido respetada por los primeros mandatarios no hubiéramos tenido semejantes hechos de violencia que surgieron el año 2019 y yo era senadora electa y todas las declaraciones que he podido hacer eran inviolables porque yo tenía un fueron parlamentario, no pueden ustedes señores del Tribunal acusándome en este momento con un juicio ordinario por ningún motivo, yo no reconozco a este Tribunal, yo no reconozco la acusación de los señores fiscales porque están actuando políticamente, porque yo como ex senadora y como ex Presidente, les guste o no, tendría que ser sometida a un Juicio de Responsabilidades, porque esto es lo que corresponde.
Yo no eludo mis responsabilidades, yo nunca he pedido impunidad, sí alguna transgresión, dicen que hice en mi calidad de senadora, correspondía a la Asamblea (Legislativa) enviarme a una Comisión de Ética, correspondía al Senado nacional iniciarme algún proceso, primero ante la Comisión de Ética, pero no lo hicieron en su momento, por el contrario, más bien avalaron la sucesión constitucional. Hemos trabajado en coordinación con la Asamblea. Yo no sabía que un ‘Gobierno de facto’ tenía una Asamblea que legislativa.
Lo que se quería era pacificar el país por tantos hechos de violencia donde ya habían muertos, en Montero ya había personas muertas.
Cuando Yo estaba en la ciudad de Trinidad el 10 de noviembre como senadora nacional como cualquier ciudadana que estaba en las calles ya habían personas muertas, ya habían emboscada en la carretera Potosí-La Paz a personas, a mujeres que las ultrajaron, que nos les dejaron pasar, los hechos de violencia estaban en todo el país, en ésta ciudad (La Paz) fueron donde más vivieron los hechos de violencia y eso tenía su origen, ese fraude electoral y ese capricho de Evo Morales de tener un cuarto año más de gestión, eso lo vivimos todos los bolivianos.
Por lo tanto señores del Tribunal, este juicio político yo no lo reconozco, yo tengo que ser juzgada por un juicio de responsabilidades, ustedes le están dando un golpe a la legalidad, yo tengo mis derechos y sí los conozco.
Cuando yo estaba en la ciudad de Trinidad como senadora nacional se dice que yo ya tenía contactos con la gente, es decir, que yo estaba como la super mujer, la super senadora le estaba manipulando toda la situación para yo hacerme del poder, nada más falso, yo no tenía voz ni voto para nada, estaba en la calle como una ciudadana común y corriente, estaba en calle también protestando porque no se había respetado mi voto, pero en ese momento yo era la segunda vicepresidenta de la Cámara de Senadores, en ese momento pudo haber sido cualquiera otro de mis colegas, el destino o yo que soy cristiana digo, fue Dios el que hizo que yo esté en ese momento como segunda Vicepresidenta de la Cámara de Senadores, porque como digo, cualquiera de mis colegas pudo haber tomado ese puesto y esa era la persona que hubiera sido la Presidente en la sucesión constitucional o el Presidente sí hubiera sido hombre.
No era Jeanine Áñez la que estaba ahí, era la segunda Vicepresidenta de la Cámara de Senadores y en ese momento mi nombre salió en todos los Medios de Comunicación como la posible Presidenta en sucesión constitucional, (yo) he podido decir que no, que hubiera sido más cómodo, porque creo que se necesita, o ser muy irresponsable o ser muy valiente para tomar un país en semejante convulsión.
No era Jeanine Áñez la que estaba manipulando ni dando instrucciones, ni dando ordenes, yo no moví un dedo señores del Tribunal para llegar a la Presidencia, mi nombre comenzó a salir en los Medios de Comunicación por sucesión constitucional y pude haber dicho que no, porque en ese momento el Presidente había renunciado, el Vicepresidente había renunciado, la Presidenta de la Cámara de Senadores había renunciado, el Presidente de la Cámara de Diputados había renunciado, el Vicepresidente de la Cámara de Senadores había renunciado, por eso recayó la posibilidad en Jeanine Áñez, que pudo haber sido el senador (Oscar) Ortíz, o la senadora (Carmen Eva) Gonzáles que eran los senadores en ese momento, pero estaba yo, era yo la segunda Vicepresidenta de la Cámara de Senadores y yo no eludo mis responsabilidades, yo las enfrento.
¿Por qué no asumió Adriana Salvatierra, ¿por qué no asumió Víctor Borda?, por ejemplo. Eso deberían preguntarse. ¿Por qué no tuvieron el valor de asumir la Presidencia?. ¿Saben por qué?, por cobardes, porque sabían que tenían un país en llamas, porque sabían que había mucha convulsión social.
Y se dice también que yo ya había hecho gestiones para que me esperen en la ciudad de La Paz, quiero decirles señores del Tribunal que yo ni conozco a los señores que ahora está acusados, el señor Mendieta, el señor Arce.
Si señor presidente, de manera falsa aquí se ha dicho de que ya yo estaba coordinando con militares o con policías para que puedan venir a recibirme o a hacer quién sabe qué gestiones, para yo hacer de la Presidencia. (Sin embargo) creo que fui bastante clara desde el principio, cuando yo manifesté públicamente que me correspondía por sucesión constitucional pero que no me iba a imponer, que sí habían otras opciones yo estaba para aportar a la pacificación del país, no estaba para imponer, no estaba en condiciones de estar instruyendo ni dando ordenes a nadie, no tenía voz ni voto ni en mi partido si quiera, mucho menos voy a tener teléfono o contacto con militares o con policías para que puedan hacer un golpe de Estado, o sea yo era ya la super mujer que iba venir a sacar a quien esté en el poder y hacer yo de la Presidencia, ¿con qué físico en ese momento yo podía hacer una cosa de esa magnitud?.
Quiero decirles que nunca tuve contacto con ningún militares que ni los conozco si quiera. Yo llegué en avión comercial aquí a la ciudad de La Paz. Sí me esperaron en un helicóptero de la Fuerza Aérea, pregúntele a ellos ¿quién les instruyó estar allá?. Con el senador Ortiz nos preguntamos, sí debíamos o no subir a ese helicóptero, porque él me decía, ‘los militares trabajan para Evo Morales nos van a secuestrar’. Con mucho temor subimos a ese helicóptero porque no habían condiciones de bajar de manera normal de El Alto hasta la ciudad de La Paz, por eso fue que nos subimos al helicóptero.
Pero resulta que ahora nos están, también a ellos acusando de hacer un golpe militar, de portar las armas, quién sabe de qué iniquidades, cuando ellos (militares) lo que hicieron fue cumplir con su obligación porque este país, la gente en la calle, estaba indefensa, eso fue lo que sucedió.
Dijeron que desde el momento en que yo llegué a la ciudad de La Paz me acompañaron ya, que tenía guarda espaldas, tenía guardias, nada más falso. Cuando bajamos al Colegio Militar, si nos recibió el Director, que no recuerdo quién es, que no sé quién era, simplemente nos quedamos en una oficina solo esperando que llegué mi familia.
Dijeron que ahí ya teníamos acompañamiento policial, falso, no tenía ningún acompañamiento policial. Cuando llegué a la Asamblea, no sé en que momento yo ya tenía unas motos ahí, ¿y por qué era?, porque en todos los Medios de Comunicación salió que mi nombre podría ser la que asuma la Presidencia y tuve que hacerlo porque había que darle al país primero tranquilidad y tenia que darle certidumbre, porque ya los hechos de violencia habían rebasado a la Policía.
Y cuando llegamos a la Cámara de Senadores todos asumían que yo podía sería la sucesora por la sucesión constitucional porque todos habían renunciado y renunciaron por cobardes, porque sabían que había un país totalmente incendiado, sabían que había mucha violencia en las calles, para ese entonces ya habían incendiado la casa de Casimira Lema, habían incendiado la casa del señor Waldo Albarracin, habían incendiado seis módulos policiales, habían incendiado todos los PumaKataris, la violencia estaba en las calles, la gente estaba aterrorizada.
Nosotros nos reunimos con todos los parlamentarios porque esa era nuestra obligación, nosotros como parlamentarios teníamos la obligación de buscarle una salida a esa convulsión social, porque los cobardes huyeron, para ese momento ya también Evo Morales y Álvaro García había huido a a México en un avión militar, renunciando a la Presidencia y a la Vicepresidencia; ¿eso también será que yo lo provoqué?. En ese momento recién Bolivia conoció mi nombre por lo tanto no pueden decir que esto fue algo orquestado, yo fuí producto de esa situación de convulsión, yo fui una consecuencia de esa convulsión social, que me atreví hacer algo por el país, ese fue mi delito, pacificar el país, asumir el Poder porque tuve que hacerlo por sucesión constitucional, porque así lo establecía la Constitución Política del Estado al renunciar el Presidente y el Vicepresidente y en la Cámara de Senadores al renunciar la Presidenta y el Vicepresidente de la Cámara de Senadores, así lo establecía el reglamento en su artículo 41.
Antes de venirme yo a la ciudad de La Paz ya habían instituciones, (que) estaban preocupadas por los hechos de violencia y que estaban siendo los facilitadores del dialogo, que estaba negociando con gente del MAS que hablaban con Evo Morales y que son de conocimiento público esas reuniones en la Universidad Católica, en ese momento ahí también salió mi nombre, no era porque era Jeanine Áñez sino a la segunda Vicepresidenta de la Cámara de Senadores, en ese momento fue que dijeron, ‘¿respetando la sucesión constitucional usted asumiría el Poder?’, se me preguntó y yo dije, ‘sí tengo el apoyo porque no me voy a imponer. Quiero ser enfática en esto, jamás dije que yo iba a venir a imponer ni que quería, tuve que hacerlo porque era una obligación y a mí me criaron responsable. A mi me dieron una responsabilidad y lo asumí como tal y siempre dije, ‘sí tengo el apoyo’ porque este es un movimiento ciudadano, este es un movimiento cívico es de las personas que se siente agraviadas porque no le respetaron su voto, por eso fue que salieron a las calles. Sí yo tengo el apoyo yo lo voy a asumir, pero sino tengo el apoyo y ustedes tiene otra opción…piensen, jamás quise ser, no estaba en libros tener que asumir la Presidencia, menos en una situación como la que estábamos viviendo. Sin embargo estas son las consecuencias, que digan que yo era la super mujer que vino aquí a instruir a dar ordenes.
Y tengo una anécdota, porque como el el Movimiento al Socialismo se habla tanto de feminismo, del derecho de la mujer, cuando estaban las negociadoras por parte de Evo Morales, en esa comisión de dialogo de facilitadores donde estaban diferentes instituciones, estaban políticos, ahí buscaron la sucesión constitucional que recaía en Jeanine Áñez y las mujeres, las feministas propusieron al tercer secretario de la Cámara de Senadores, al tercero, y ahí se les dijo no era sucesión constitucional. Las mujeres en contra de una mujer. Semejante anécdota. Una beniana (Susana Rivero) no quería que otra beniana (Áñez) asuma la sucesión constitucional, querían saltarme para que sea el colega tercer secretario de la Cámara de Senadores.
Y hay otra anécdota más que está en la memoria. En la Conferencia Episcopal, cuando estaban negociando la pacificación del país, cuando estaban buscando una salida constitucional a la situación que vivíamos en el país, se le preguntó a Adriana Salvatierra, sí ella asumiría la Presidencia por sucesión constitucional y claramente dijo ‘no’. ¿Por qué no está ella de testigo para que manifieste, por qué no se atrevió a asumir, que le correspondía, más bien renunció públicamente y quiero decirles que todos los parlamentarios de oposición teníamos toda la buena fe, de a pesar de estar en esos momentos en convulsión llamamos a una sesión en la Asamblea Legislativa, convocamos a una sesión para tratar las renuncia de la Presidenta porque ellas se habían comprometido en estar ahí, pero ¿saben qué?, ellas nos boicotearon la sesión, cuando estábamos esperando a los senadores de oposición en la asamblea legislativa Adriana Salvatierra llamó inclusive a la abogada encargada del salón donde sesionábamos para decirle que no abra el salón, me los dijo la abogada de apellido Díaz, me lo dijo ella, ‘me ha llamado Adriana Salvatierra para decirme que no abra el salón, porque esta sesión no tiene que llevarse adelante’. Y me los dijo asustada, me dijo que se sentía amenazada por eso.
Adriana Salvatierra nos boicoteo la sesión, le dijo a todos los parlamentarios, que llegaron a la ciudad de La Paz para sesionar, pero no llegaron a la Asamblea porque ella instruyó, lo manifestó públicamente el ex senador Omar Aguilar, se ocuparon de llamar a todos para que no haya quórum en la sesión de la Asamblea, para que no se realice esa sesión porque seguramente ellas ya tuvieron otra instrucción, incumpliendo todos los acuerdo a los que habían llegado con los facilitadores del dialogo. Antes de que nosotros tengamos esa convocatoria, yo me reuní con la Conferencia Episcopal porque me visitaron en la Asamblea y me dijeron los acuerdo a los que habían llegado y las parlamentarias había comprometido la asistencia de todos los senadores para que se lleve la sesión y lo incumplieron porque seguramente hubo otra contraorden, boicotearon.
Más bien a ellos deberían estarlos procesando por incumplimiento de deberes, porque sabíamos todos la situación que vivía el país, entonces estábamos en la obligación de darle una situación, pero ellos incumplieron su deber al no ir a sesionar, eso es incumplimiento de deberes, a ellos deberían estarlos procesándolos, o mínimamente debían esta como testigos asistiendo en este proceso ilegal, diciendo, por qué no se atrevieron a asumir su responsabilidad. La violencia crecía en este país.
Ese día para nosotros, el día que yo llegué a la ciudad de La Paz que fue el 11 de noviembre, en la Asamblea reunidos los parlamentarios también pasamos un episodio muy desagradable porque nos hicieron desalojar la Asamblea en el entendido de que había gente del Movimiento al Socialismo que iba ir a tomar la Asamblea, que iba tomarnos, no sé como rehenes, no sé, pero lo cierto fue que tuvimos que salir de la Asamblea y yo no sé de dónde yo ya tenía custodia policial, porque voy a recalcar aquello, yo al señor Yuri Calderon ni lo conocía, al señor Kaliman no lo conocía, a todo el Alto Mando militar no lo conocía, tuve contacto con ellos recién cuando fueron a poner sus cargos a disposición. ¿Cómo iba yo ha tener el derecho o la confianza como para llamarlos y decirles quiero custodia policial?, esas cosas yo no la sé, lo cierto fue que nos sacaron de la Asamblea, lo cierto fue que esa noche yo me fui a la clandestinidad porque, luego que nos llevaron para refugiarnos a la Academia de Policías, también nos dijeron de que las hordas masistas estaba yendo hasta allá porque ya sabían que nosotros nos encontrábamos allá, ¿qué querían hacernos?, no sé. Pero esa noche yo me pasé en la clandestinidad y también en el Beni quisieron quemar mi casa, como ya por todo lado se hablaba a Jeanine Áñez como la que iba asumir la Presidencia por sucesión constitucional, se fueron a quemar mi casa, pero gracias a Dios no pasó nada porque los vecinos, la gente de mi barrio fue a resguardarla, también ante ese hecho la Policía mandó patrullas para que no lleguen a quemar mi casa.
Esa noche yo me la pasé en la casa de una policía, que la vi llegar llorando a su casa porque decían que ya no no tenemos gases, no tenemos cómo proteger a la gente porque la violencia nos ha rebasado, la gente violenta que está en la calle a la Policía nos ha rebasado. Curiosamente me vengo a enterar de que la casa donde yo estaba era de la actual directora de este recinto penitenciario, que se ha convertido en mi verduga igual que todos los de los representantes de las instituciones públicas. ¿Qué hice o qué no hice para que ella se conviertan en mi verduga, no lo sé, pero lo cierto que esa noche yo me quedé en esa casa, dormimos en esa casa, no recuerdo qué dirección qué dirección era.